Todos hemos oído hablar alguna vez sobre el concepto de inteligencia emocional y de su importancia en el trabajo.
Por ello, desde Open Webinars te contamos qué es la inteligencia emocional, centrada sobre todo en el ámbito laboral, y como se ha convertido en un aspecto fundamental en el día a día.
Despertar el liderazgo emocional en jóvenes es clave para su éxito en la vida.
El liderazgo emocional implica la capacidad de reconocer y gestionar nuestras emociones y las de los demás. Es importante que los jóvenes aprendan a establecer relaciones sanas y empáticas con los demás.
¿Suena trillado?
Lo sé, pero piensa esto, Los jóvenes son la fuerza impulsora de nuestro futuro. En consecuencia, es fundamental que aprendan a liderarse a sí mismos y a los demás de manera efectiva.
Y es que piénsalo bien ¿Tú no hubieses querido que te hablaran de esto mientras crecías? Entender de dónde venía ese dolor, la rabia, la ansiedad que genera el futuro, ¡DIOS SABE QUE YO SI!
Debemos enseñar a los jóvenes a manejar el estrés y a cultivar la resiliencia. Fomentar el liderazgo y alentar su desarrollo, por eso te traigo esta propuesta. ¿Qué es? Un encuentro de mujeres latinas emprendedoras que se reunirán para disfrutar de un encuentro poderoso y transformador.
Además de disfrutar una mañana llena de sorpresas en un lugar de ensueños, la asistencia patrocina a un joven de la ONG (His House Children´s Home), para que durante este verano participe en el Summer Camp ¨El Vuelo de la Cometa¨, programa de Liderazgo e Inteligencia Emocional, que le brindará la oportunidad de adquirir herramientas para lograr alcanzar sus sueños.
Todos hemos oído hablar alguna vez sobre el concepto de inteligencia emocional y de su importancia en el trabajo.
Por ello, desde Openwebinars te contamos qué es la inteligencia emocional, centrada sobre todo en el ámbito laboral, y como se ha convertido en un aspecto fundamental en el día a día.
Vamos a empezar desde el principio. La inteligencia emocional la podemos definir como una serie de habilidades psicológicas que nos permiten expresar, percibir, manejar y valorar nuestras propias emociones con el fin de entender a los demás.
Es decir, esta habilidad nos ayudará a conocer nuestras propias emociones para desarrollar nuestro autocontrol; manejarlas y expresarlas de forma apropiada con el objetivo de saber comunicarnos y suavizar expresiones como la ira o furia, fundamental en las relaciones interprofesionales; motivarnos hacia nuestros objetivos dominando la impulsividad y, reconocer las emociones de los demás gracias a la empatía.
Debemos indicar que la empatía está estrechamente relacionada con la inteligencia emocional ya que, mientras la primera se centra en la comprensión de las emociones de los demás, la segunda está orientada a la comprensión de las emociones de uno mismo.
Si no aprendemos a identificar nuestros sentimientos no seremos capaces de ponernos en el lugar de los demás. Por este motivo las personas empáticas pueden interactuar de manera suave y efectiva con los demás, lo que las convierte en grandes líderes de equipo.
Existen cuatro autores referentes en el sector: Daniel Goleman con su libro Inteligencia emocional; Salovey y Mayer quienes identifican la inteligencia emocional como un “pensador con un corazón” (“a thinker with a heart”) que percibe, comprende y maneja relaciones sociales; y el Reuven Bar On que incluye no solo las cualidades relacionadas con las emociones para definir la inteligencia emocional como la empatía, sino que incluye otras positivas como la asertividad, la autorrealización y la autoestima.
Centrándonos en Daniel Goleman, este autor indica que la inteligencia emocional posee cuatro fases que funcionan de manera simultánea: Fases evolutivas de la inteligencia emocional. Conciencia de las propias emociones: el individuo identifica y comprende qué es lo que siente y por qué.
Manejo de las propias emociones: en esta fase la persona gestiona dichas emociones de manera conveniente. Conciencia de las emociones de los demás: aquí el individuo analiza y se preocupa por el comportamiento y las emociones del resto de personas de su entorno.
Manejo de las emociones de los demás: la persona adquiera consciencia de las emociones de los demás lo que le permite influir en ellos para alcanzar una finalidad concreta.
Aunque tengamos que fomentar nuestra inteligencia emocional en la edad adulta, lo cierto es que es una habilidad natural del ser humano.
La adquirimos desde que nacemos y la vamos desarrollando a medida que vamos creciendo.
Sin embargo, no todos la fomentamos del mismo modo, por este motivo es muy importante continuar siempre con nuestro aprendizaje.
David G. Cortinas –
Director y Propietario
del Periódico La Voz