¿Eres adicta a la belleza?
Verdaderos obsesivos por la cosmética
Espejito, espejito...
Cremas, maquillaje, tratamientos de belleza como la limpieza facial, manicuras, pedicuras, masajes de cualquier gama, centros de spa, botox y por supuesto, la cirugía, se han abierto paso en el mundo cotidiano de la belleza, al alcance de casi todas las manos.
En los tiempos que corren, se está desarrollando una necesidad casi compulsiva de ser perfectos, no sólo en nuestro trabajo o en la vida familiar, sino también, y a veces siendo prioritario, con nuestro aspecto físico.
¿Impulso consumista?, ¿deseo de ser distintos?, ¿temor a envejecer? Las causas de esta adicción a la cosmética no están claras, pero sí sus consecuencias. El mundo de la belleza invade el universo cotidiano. Y entra marcando tendencias.