WASHINGTON – El gobierno de Estados Unidos recibe desde hoy (3 de abril) las solicitudes de 65 mil visas que otorgará en 2008 para trabajadores extranjeros altamente calificados, una cuota que para algunos es insuficiente y para otros una amenaza.
Las más codiciadas son las visas H1B creadas por una ley de 1990 y que permiten que empresas de Estados Unidos incrementen su fuerza laboral mediante la contratación de extranjeros que son admitidos en el país, inicialmente, por un período de hasta tres años.
Este visado puede extenderse por otros tres años.
“La cuota no es realista para una economía global del siglo XXI”, opinó Muzaffar Chishti, director del Instituto de Política Migratoria, en la Universidad de Nueva York. “Son empleos industriales altamente estratégicos”. “Se trata de científicos, ingenieros en computación, arquitectos”, agregó. “El circo que rodea la apertura de recepción de las solicitudes es otra prueba de que todo el sistema de inmigración necesita una reforma”. La demanda es tan intensa que la cuota de 65.000 visados H1B para el período fiscal 2007, que comenzó el 1 de octubre pasado, se había agotado ya en junio de 2006.
Algunos expertos creen que la cuota para los visados del período fiscal 2008 podría agotarse en pocos días.
Pero dado que la mayor parte de estas visas se otorgan a científicos e ingenieros en computación, ejecutivos, técnicos, médicos, arquitectos, y otros trabajadores con grados universitarios avanzados, la H1B se ha convertido en anatema para algunos gremios en los sectores de comunicación y medios, y para académicos y gerentes.
En 2002, la Asociación de Electrónica de Estados Unidos, que es promotora de la expansión de este programa, calculó que la economía había creado unos 96,700 empleos en tecnología de informática.
Ese mismo año, de acuerdo con la Oficina de Ciudadanía y Servicios de Inmigración (USCIS), el 53 por ciento de las 163 mil visas H1B otorgadas fueron en empleos de tecnología informática, esto es 86,390 puestos de trabajo ocupados por extranjeros altamente calificados. “A pesar del requisito de que a los trabajadores con visa H1B se les pague el salario prevalente en la industria, los trabajadores con esas visas ganan significativamente menos que sus pares estadounidenses”, dijo John Miano, del Centro de Estudios de Inmigración, un grupo que aboga por límites a la inmigración.