Jóvenes atentos a manera de conducir de sus padres
Adolescentes aprenden
"Los adolescentes aprenden las reglas de manejo observando a sus padres. Los padres desempeñan un papel definitivo en la formación del tipo de conductor que serán sus hijos y reconocen esta responsabilidad. Según la encuesta, un 85 por ciento de los padres dice que tratan de promover la seguridad en el camino conduciendo de manera prudente", expresa Bill Windsor, Vicepresidente de seguridad de Nationwide.
Si bien los padres reconocen que están siendo observados y que deben predicar con el ejemplo, a menudo se pierde en la práctica. Dos de cada cinco padres encuestados dicen no demostrar sus malos hábitos de manejo delante de sus hijos, pero muchos jóvenes reportan haber visto a sus padres conducir de manera agresiva, buscar objetos en el auto, hablar por los celulares y no usar sus cinturones de seguridad.
La consecuencia al desaprovechar esta oportunidad es grave - según el Instituto de Seguros para la Seguridad en las Autopistas y la Administración Nacional de Seguridad en el Tráfico de Autopistas, los accidentes automovilísticos son la causa principal de muerte de adolescentes estadounidenses. Para los jóvenes entre 16 a 18 años, los accidentes son la causa de más de un tercio de todas las muertes. "Los padres pueden ayudar a sus hijos a aprender conductas de manejo prudentes poniendo en práctica la seguridad cada vez que arranquen el auto, independientemente de si sus hijos están o no en el auto," continúa Windsor.
"Y cuando se trata de salvar potencialmente la vida de los jóvenes y de proteger a otras personas en la vía, hay muy pocas conversaciones tan importantes como el tema de ser un conductor prudente con los pre-adolescentes y los adolescentes". Si bien casi la mitad de los padres reportan conducir al límite de velocidad o menos, la mayor parte del tiempo, un 80 por ciento de los jóvenes observa que sus padres conducen sobre el límite de velocidad.
Más de la mitad de los jóvenes ha observado a sus padres realizar múltiples tareas detrás del volante (hablar por el celular, ajustar el radio y/o corregir a un niño que se comporta mal), discutir con un amigo o pasajero y/o discutir con otros conductores e incluso gritarles.
Casi tres de cada diez jóvenes encuestados han sentido temor cuando uno de sus padres conduce y un 53 por ciento de los padres han sentido temor al ir con su hijo adolescente al volante. Los conductores adolescentes tienen un 66 por ciento más de probabilidad de obedecer los límites de velocidad y un 51 por ciento más de probabilidad de mantener ambas manos en el volante que sus padres."Nuestra investigación y la encuesta de Nationwide deben enviar un mensaje claro en el sentido de que, cuando se trata de aprender buenos hábitos de conducir, los padres juegan un papel importante".