Usnas fotos ‘casuales’ en lugares no públicos de la majestuosa ruina maya Chichén Itzá, de la Península de Yucatán, a los que no se ha permitido el paso ni siquiera al presidente de México, le costará a la cantante de pop mexicana Thalía una multa, aunque no significativa, informó la autoridad arqueológica de México.
“Tendrá que realizar el pago correspondiente con el que se le permite el uso de esas fotografías de manera pública”, dijo el jueves Luciano Cedillo, titular del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH).
Thalía fue denunciada por el INAH después que las fotos, tomadas por la madre de la cantante, fueron publicadas en julio pasado en una revista mexicana de espectáculos (TVyNotitas), declaró la hermana de la cantante, Federica Sodi.
Sodi además es la representante del INAH en Quintana Roo (este), demarcación donde están las ruinas.
Versiones periodísticas señalaron que Thalía sólo podría haber llegado al “Cenote Sagrado” de la ciudad arqueológica -construida alrededor de los años 435 y 455- con la ayuda de su hermana.
En un comunicado, la cantante mexicana manifestó su intención de pagar la multa, para lo cual sus abogados “están cooperando en todo lo que se requiera” con el INAH.
Thalía explicó que su intención al entregar las fotos a algunos medios para su publicación fue que todo el mundo pudiera pariticipar con ella “de la belleza, magia y grandeza de nuestros pueblos ancestrales y actuales”, aunque no explicó cómo accedió a zonas restringidas de las ruinas.
Federica Sodi aseguró que su hermana no tuvo un trato especial durante su visita y consideró que el “error” de su hermana fue haber dado las fotos para su publicación a la revista.
Thalía se fotografió, entre otros lugares, en el “Cenote Sagrado”, y para llegar allí se requiere “un permiso especial y el pago de la cuota respectiva”, señaló Camilo Guillén, secretario general del Sindicato de Trabajadores del INAH.
Según Guillén, ni el presidente de México, Vicente Fox, ni el de Estados Unidos, George W. Bush, así como tampoco el premier de Canadá, Stephen Harper, quienes visitaron las ruinas en marzo, tuvieron acceso a las áreas restringidas.
“Este asunto será tratado (…) de acuerdo con la normatividad del INAH”, por lo tanto la actriz pagará la sanción correspondiente que “no es realmente significativa”, comentó Luciano Cedillo.