No se despidieron
Los jugadores salieron en autobús desde el Centro de Alto Rendimiento (CAR), mismo que los trasladó a las instalaciones del aeropuerto internacional de la Ciudad de México, donde subieron directo a la zona de abordar. De esta forma evitaron pasar por el mostrador de documentación y también un poco de tumulto por las decenas de aficionados que llegaron a temprana hora provistos de cámaras, cuadernos y playeras para la foto y el autógrafo.
En esa área también se encontraban los representantes de los medios de comunicación entre reporteros, fotógrafos, camarógrafos y asistentes, a pesar de que el departamento de prensa avisó desde el día anterior la forma de acceso de los jugadores "tricolores".
Ante la falta de seleccionados, el que robó la atención fue el secretario general de la Federación Mexicana de Futbol, Decio de María, quien repartió autógrafos, posó para las foto y ofreció entrevistas. Los fotógrafos se tomaron entre sí varias placas, mientras los camarógrafos hicieron tomas de grupo para testimoniar la ausencia de los futbolistas.