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“Tiempo de Mujer y Derechos” La Violencia: Signo Contra La Mujer
Escrito el 25 Aug 2013
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La lucha de las mujeres en el mundo para lograr el reconocimiento de sus derechos humanos, sociales y políticos, y el respeto a su dignidad, ha sido un esfuerzo de siglos. Un grave problema contra el cual han luchado históricamente las mujeres, en el planeta entero, es la violencia que se ejerce contra ellas por el solo hecho de serlo. La violencia, signo contra la mujer.
La violencia de género encuentra sus raíces profundas en la característica patriarcal de las sociedades, en las que prevalecen estructuras de subordinación y discriminación hacia la mujer, que consolidan la conformación de conceptos y valores que la descalifican sistemáticamente.
Cuando hablamos de violencia contra la mujer nos referimos a todo acto de violencia que resulte o pueda tener como resultado un daño físico, sexual o psicológico para la ella, inclusive las amenazas de tales actos y la coacción o privación arbitraria de libertad, tanto si se produce en la vida pública como en la privada.
Hablemos de números de Naciones Unidas: del 15 al 71% de las mujeres han sufrido violencia física o sexual de su pareja; del 8 al 16% de las mujeres han sido víctimas de maltratos físicos durante el embarazo y más de un 30% de ellas iniciaron su sexualidad sin su consentimiento. Mayor escándalo radica en que 9 de cada 10 mujeres no denuncian.
La violencia contra la mujer constituye un grave problema de salud pública y de violación sistemática de sus derechos humanos, que muestra en forma dramática los efectos de la discriminación y subordinación. Todas las mujeres son víctimas potenciales de maltrato, y muchas conviven con la violencia sin ejercer acciones legales.
El miedo, la desinformación, la ausencia de garantías, la dependencia económica y el mantenimiento de la familia, son algunos de los elementos que tienen en contra las víctimas a la hora de formalizar una denuncia.
Las sociedades equívocamente han tratado de etiquetar este flagelo a sectores populares o de clase baja, pero la realidad es que la mujer en ninguna clase social está exenta de sufrir las penurias de la violencia. La acción de las organizaciones de mujeres y de las instituciones oficiales y privadas que luchan contra la violencia de género, ha logrado una mayor visión del problema, produciéndose un cambio en su percepción pública, dejando ya de ser un asunto exclusivamente privado. Mujer, es hora de conocer, defender y ejercer tus derechos.
Manuel Magaldi
Especialista en derechos de la mujer
Twitter:@mujerderechos
La violencia de género encuentra sus raíces profundas en la característica patriarcal de las sociedades, en las que prevalecen estructuras de subordinación y discriminación hacia la mujer, que consolidan la conformación de conceptos y valores que la descalifican sistemáticamente.
Cuando hablamos de violencia contra la mujer nos referimos a todo acto de violencia que resulte o pueda tener como resultado un daño físico, sexual o psicológico para la ella, inclusive las amenazas de tales actos y la coacción o privación arbitraria de libertad, tanto si se produce en la vida pública como en la privada.
Hablemos de números de Naciones Unidas: del 15 al 71% de las mujeres han sufrido violencia física o sexual de su pareja; del 8 al 16% de las mujeres han sido víctimas de maltratos físicos durante el embarazo y más de un 30% de ellas iniciaron su sexualidad sin su consentimiento. Mayor escándalo radica en que 9 de cada 10 mujeres no denuncian.
La violencia contra la mujer constituye un grave problema de salud pública y de violación sistemática de sus derechos humanos, que muestra en forma dramática los efectos de la discriminación y subordinación. Todas las mujeres son víctimas potenciales de maltrato, y muchas conviven con la violencia sin ejercer acciones legales.
El miedo, la desinformación, la ausencia de garantías, la dependencia económica y el mantenimiento de la familia, son algunos de los elementos que tienen en contra las víctimas a la hora de formalizar una denuncia.
Las sociedades equívocamente han tratado de etiquetar este flagelo a sectores populares o de clase baja, pero la realidad es que la mujer en ninguna clase social está exenta de sufrir las penurias de la violencia. La acción de las organizaciones de mujeres y de las instituciones oficiales y privadas que luchan contra la violencia de género, ha logrado una mayor visión del problema, produciéndose un cambio en su percepción pública, dejando ya de ser un asunto exclusivamente privado. Mujer, es hora de conocer, defender y ejercer tus derechos.
Manuel Magaldi
Especialista en derechos de la mujer
Twitter:@mujerderechos