Mi Punto de Vista

Por David G. Cortinas/
Fernando de Ceves



L a paciencia es una virtud porque cultiva la fuerza interior y el buen juicio. En un mundo que a menudo se siente apresurado y exigente, la capacidad de esperar con calma y tolerar retrasos realmente nos empodera para tomar decisiones claras.

La paciencia nos ayuda a evitar actuar por frustración o ira, evitando así que tomemos decisiones precipitadas que podrían tener consecuencias negativas.
Con paciencia, somos capaces de sortear los desafíos con la cabeza fría. Nos ayuda a centrarnos en los objetivos a largo plazo en lugar de en los contratiempos a corto plazo. La paciencia fomenta la resiliencia. Cuando las cosas no salen según lo planeado, la paciencia nos da la fuerza y la determinación para seguir siendo optimistas.

Cultivar la paciencia nos permite apreciar el proceso de crecimiento y nos ayuda a manejar la adversidad con gracia. Esto promueve una mayor paz y satisfacción. Estos son algunos ejemplos: En la vida, tenemos planes y esperamos que salgan de cierta manera. La Vida puede tener otros planes.

Podemos estar en una relación amorosa, incluso casados con alguien, y esperar vivir nuestras vidas con esa persona. Algún día, esto podría cambiar. La relación puede terminar. Y si nos apresuramos, podemos decir algo hiriente o hacernos algo dañino a nosotros mismos, como adicciones para adormecer el dolor.

Si practicamos la paciencia, podemos decir: "Está bien, esto no es lo que esperaba, pero ¿cuáles son mis opciones?"
Cuando somos pacientes, podemos hacer preguntas sobre el final de la relación. Y lo que es más importante, podemos preguntarnos qué tenemos que hacer en el momento presente. Al día siguiente, hacemos la misma pregunta, y así sucesivamente.

Lo principal que nos proporciona la paciencia es la capacidad de lidiar con el presente.
Si nos diagnostican cáncer, podemos investigar y descubrir las mejores opciones para tratar el cáncer. Si nuestros hijos van por un camino aterrador, podemos responder de maneras que ayuden a apoyarlos y crear relaciones saludables.

Con paciencia, tomamos una cosa a la vez. Cuando estaba arreglando la televisión, no pensaba en cuánto del juego me estaba perdiendo. Me centré en cómo hacer que las cosas funcionaran, considerando todas las opciones. Con paciencia, nos enfocamos en el presente.
Esa es la belleza de la paciencia. Es posible que la paciencia no siempre nos dé lo que queremos.

Pero podemos permanecer tranquilos, pacíficos y felices a pesar de todo. No solo estaba tratando de hacer que la televisión funcionara, sino que también pasaba tiempo con mi familia y amigos. La paciencia juega su papel más importante en nuestras interacciones con las personas. Con paciencia, no arremetemos contra la gente.

Trabajamos en la recopilación de más información y en la búsqueda de una solución.
Paciencia y gratitud, Otra clave importante para la paciencia es la gratitud. En lugar de centrarnos en lo que queremos ahora mismo, nos centramos en estar agradecidos por lo que ya tenemos.

Un estudio sobre las finanzas y la paciencia fue publicado en el Revista de Ciencia Psicológica. Lo que los investigadores descubrieron fue que los sentimientos de gratitud reducen automáticamente la impaciencia hostil. Los investigadores hablaron sobre cómo la incapacidad de resistir las tentaciones reveló una serie de problemas que van desde la deuda de las tarjetas de crédito y los ahorros inadecuados hasta la alimentación poco saludable e incluso la adicción a las drogas.

Los investigadores descubrieron que el grado de paciencia exhibido estaba directamente relacionado con la cantidad de gratitud que sentía un individuo. La gratitud es una emoción hermosa.
Cuando estamos agradecidos por lo que tenemos, mejoramos nuestra capacidad de ser pacientes. Si estamos de acuerdo en que la paciencia es una virtud, debemos darnos cuenta de que la vida cambia. Si nos resistimos a estos cambios, sufrimos. Ese sufrimiento crea más impaciencia. Pero si aceptas que una de las garantías de la vida es el cambio, te relajarás.

La paciencia es estar presente, examinar tus opciones y trabajar para avanzar. Si las cosas salen bien, genial. Pero si no lo hacen, entonces intentamos otra cosa. Es así de simple. Hay mucho bien en el desarrollo de la virtud de la paciencia. Requiere trabajo, requiere esfuerzo, pero aquí hay muchos beneficios de desarrollar la paciencia. Con paciencia, descubrirás que la vida fluye más bellamente cada día.

David G. Cortinas – Director y Propietario del Periódico La Voz
Fernando de Ceves – Periodista Nacional de la Asociación de los Periódicos Latinos