Barack Obama en blanco y negro
De momento, las encuestas de intención de voto indican que los afroamericanos están más por la candidatura de Hillary Clinton que por la de Barack Omaba y los separan nada menos que 15 puntos.
Obama, con 45 años y senador demócrata por Illinois, nació en Hawai, y es hijo de padre keniano y madre blanca, del estado de Kansas.
A pesar de que su aspecto y sus maneras encuadran perfectamente en el prototipo de negro educado, Obama no es descendiente de esclavos africanos y afroamericanos, que dan a este extremo gran predicamento, no lo consideran "uno de los suyos". De momento, la mayor y más prestigiosa Asociación para el Progreso de la Gente de Color (NAACP, por su sigla en inglés), no ha hecho ningún despliegue de apoyo a Obama y los políticos negros tradicionales en las campañas a la Presidencia, como los reverendos Jesse Jackson y Al Sharpton, le han dedicado tímidos comentarios.
En el caso de Sharpton, que aspiró a la candidatura demócrata en 2004, es quizá porque podría volver a intentarlo y la competencia "negra" de Obama no le interesa.
El apoyo de Jackson ha sido también tibio. Ha dejado caer que no lo ve mal, pero no lo ha respaldado públicamente.
En los análisis sobre Obama que se prodigan en la prensa, los expertos subrayan que está claro que los líderes negros convencionales al estilo Martin Luther King tienen hoy pocas posibilidades de convencer a quien no forme parte del "núcleo duro" de los afroamericanos en Estados Unidos. Por eso creen que Obama, al que muchos de los negros de a pie no consideran "su candidato", puede llegar a un sector de esta minoría, quizá el más educado, pero desde luego no el más amplio.
Louis W. un afroamericano cincuentón que trabaja en un supermercado de Virginia ayudando a llenar las bolsas, lo tiene claro. "Ser negro es más que tener la piel negra... hombre, es compartir miserias, raíces, problemas, y creo que él (Obama) no sabe mucho de eso". El panorama es distinto para Obama cuando se trata de los jóvenes afroamericanos a quienes, como a Germaine, que este año termina la escuela secundaria en Washington les gusta Obama.
"Es guapo... y dice cosas interesantes. ¡No sólo habla del pasado!", afirma, y por eso dice que "si se le puede votar (porque consiga la candidatura) le votaré".