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Águilas confirmaron quien es quien
Escrito el 14 Nov 2005
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Todo intenso, tal como se debe de disputar este tipo de duelos, es el que protagonizaron América y Cruz Azul, en el que el mejor juego colectivo de los locales los hizo ver mejor durante los primeros 45 minutos. La explosividad que caracteriza al actual monarca del futbol mexicano se hizo patente desde muy temprano, pues en los primeros diez minutos de acción generaron dos llegadas que no terminaron en gol gracias a la oportuna intervención de la zaga celeste.
Sin embargo, fue la "Máquina" el equipo que bien pudo irse al frente en la pizarra luego de una clara mano dentro del área de Raúl Salinas, que el silbante Germán Arredondo no se atrevió a señalar.
Como ha sido a lo largo de este torneo y de otros tantos, Cuauhtémoc Blanco se erigió como el jugador desequilibrante de su equipo y la primer muestra la dio al minuto 26 al colocar un pase exacto a la cabeza del brasileño Kléber Boas.
Aunque el "amazónico" remató cruzado, el guardameta Oscar Pérez se luciera y así evitar la caída de su marco.
Este fue el primer aviso de Águilas, que durante gran parte tuvo una mejor rotación del balón y supo controlar a un conjunto celeste que dependió mucho de los argentinos César Delgado y Gabriel Pereyra, quienes poco pudieron hacer ante la férrea marca que les impusieron.
Una vez más, el talento de Blanco se hizo presente al filtrar un pase a Oscar Rojas que lo dejó de frente a la meta cruzazulina, sin embargo, el esférico se le alargó, situación que aprovecho muy bien el portero Oscar "Conejo" Pérez para achicar y dejar "atorado" el grito de gol de los aficionados americanistas.
Hacia la recta final de la primera fase, Cruz Azul intentó reaccionar con un disparo de Tomás Campos que se fue muy por encima del travesaño, una jugada que reflejó lo que fue el equipo visitante en esta primera mitad. Si el América fue mejor en los primeros 45 minutos, la parte complementaria fue propiedad del cuadro celeste, que mejoró en gran medida su accionar gracias a los ingresos del argentino Diego Rivero y Rogelio Chávez, quienes le mejoraron la posesión del balón, de la que habían carecido.
América se vio acorralado con la presión que ejerció Cruz Azul en ambas bandas a través de Alberto Rodríguez, y del joven Chávez que no dejaron caer a Óscar Rojas y a José Antonio Castro al frente.
El guardamenta Gillermo Ochoa se convirtió en factor a favor de su equipo al salvar su meta en tres ocasiones, dos de ellas de manera providencial.
La primera fue al minuto 55, cuando el "Burrito" Rivera sacó un potente disparo de media distancia que obligó a Ochoa a enviar a tiro de esquina con las dospavos manos.
Eso no fue todo, pues el joven guardameta robó un gol cantado a Francisco Fonseca cuando éste le ganó la espalda a Castro para conectar un remate de cabeza que amenazaba con colarse en el ángulo inferior derecho, al minuto 72.
Seis minutos después, Ochoa tuvo una excelente reacción al salir a achicar luego que Rogelio Chávez aprovechara un balón a segundo poste, desde donde remató pero para su mala fortuna el guardameta americanista se agigantó bajo los tres palos para enviar a tiro de esquina y así evitar el tanto que rompía el cero en el marcador.
Cuando parecía que ambos equipos repartirían puntos apareció la calidad y visión de Cuauhtémoc Blanco, quien ya había dado dos avisos en el primer tiempo, y puso un pase exacto a Kleber, quien de media vuelta batió al "Conejo" Pérez parapavo así darle el triunfo a su equipo y confirmar la hegemonía que tienen sobre los celestes.
El arbitraje estuvo a cargo de Germán Arredondo, quien tuvo una regular actuación al no señalar un penal a favor de Cruz Azul en primer tiempo y tolerar muchas patadas de ambos equipos
