Aseguran que la Batalla Contra la Pena Capital Aún No Ha Terminado

En una emotiva audiencia pública en el Comité Judicial esta semana, se escucharon testimonios sobre HB 1739, un proyecto de ley bipartidista para sustituir la pena capital en el estado de Washington con una sentencia de cadena perpetua sin libertad condicional.
Cientos de personas acudieron el miércoles a la sala A de audiencias públicas de la Cámara de Diputados para compartir sus opiniones sobre la pena capital frente a los integrantes del Comité Judicial. Resultó sorprendente que la mayoría de los testigos que han perdido a familiares a causa de homicidios pidieron a los miembros del comité eliminar la pena capital. Un tema recurrente fue que las apelaciones prolongadas, pero inevitables, obligan a las familias de las víctimas a revivir sus tragedias una y otra vez. Dijeron que lo mejor sería encerrar a los asesinos y tirar la llave, con lo que las familias podrían al menos intentar seguir adelante con sus vidas, sin tener que estar recordando los dolorosos eventos cada vez que hay una apelación por los condenados a muerte. Dos Demócratas y dos Republicanos de ambos lados de las montañas se unieron para patrocinar el proyecto liderado por el Diputado Demócrata de Seattle, Reuven Carlyle. El habló de objeciones morales a que el gobierno tome una vida humana, pero también de lo injusto que es para los contribuyentes tener que pagar millones de dólares para aplicar la pena de muerte.
Carlyle dijo que su condado ha tenido que pagar más de 12 millones de dólares en solos dos casos, y que por lo tanto, independientemente de lo que uno opine moralmente, la pena capital no es una política financieramente responsable.
El jueves los miembros del Comité Judicial optaron por no apoyar la medida, pero los simpatizantes aseguran que el año próximo lo volverán a intentar.

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