Nuevo examen de ciudadanía
Algunos grupos pro-inmigrantes como el Centro de Recursos Centroamericanos (CARECEN), Alianza Pro Reforma de Inmigración y la Coalición Nacional de Inmigración han planteado dudas sobre el contenido y amplitud del cuestionario de las pruebas para la ciudadanía.
Para estas organizaciones, lo justo sería una reforma que solucione de forma permanente los problemas de inmigración, incluidos esos exámenes, la legalización de los 12 millones de extranjeros indocumentados que se calcula viven en EEUU y la contratación de mano de obra de otros países, especialmente en la agricultura.
Los altos cargos del Servicio de Ciudadanía e Inmigración (USCIS) han negado tajantemente que el nuevo test de naturalización haya sido diseñado con la intención de evitar que más foráneos se hagan ciudadanos de este país.
El jefe de la Oficina de Ciudadanía de la institución, Alfonso Aguilar, dijo a Efe que ese argumento "es totalmente falso e irresponsable".
Por su lado, el director del USCIS, Emilio González, dejó claro que el nuevo examen, en cuyo plan piloto participarán 5.000 inmigrantes en diez ciudades, "es más amplio y centrado en aspectos cívicos".
Señaló que la meta es "inspirar a los inmigrantes a aprender sobre los valores cívicos de esta nación" para que después de jurar como ciudadanos "puedan participar totalmente en nuestra gran democracia".
González explicó en una rueda de prensa ayer que el cambio en el modelo de examen se empezó a gestar hace diez años, debido a que se descubrió que el proceso vigente no es estándar y alienta a los solicitantes a memorizar las preguntas y respuestas "sólo para pasarlo".
Agregó que otro de los aspectos irregulares de la prueba actual es que no garantiza que el nuevo ciudadano entienda el significado de las preguntas después de la entrevista.
El formulario del plan piloto, que se desarrollará durante un año desde enero de 2007, contiene 144 preguntas y respuestas de las que al final se escogerán cien que quedarán de forma permanente a partir del segundo trimestre del 2008.
En la entrevista para la naturalización, el solicitante deberá contestar correctamente seis preguntas de un total de diez para ser aprobado, destacó González, que insistió en que la nueva prueba "es más justa que la actual" y hasta cierto punto "más fácil".
Declaró que el proceso de entrevistas no cambiará, y tampoco el requisito de vivir continuamente en EEUU durante un período de cinco años para poder solicitar la ciudadanía.
El test piloto ha sido preparado por American Institutes for Research, con la cooperación de expertos en educación y grupos de la sociedad civil, a un costo de 6,5 millones de dólares, aseguró el titular del USCIS.