Vigilarán frontera por internet

El gobernador del estado de Texas, Rick Perry, anunció un plan de 5 millones de dólares para instalar cientos de cámaras de visión nocturna en la frontera con México y transmitir las imágenes por internet, de manera que cualquier persona con una computadora pueda reportar la presencia de indocumentados intentando ingresar a Estados Unidos. Para ello los ciudadanos contarían con una línea telefónica gratuita día y noche para reportar casos de invasión de propiedad, narcotráfico o cualquier situación que consideren sospechosa

"No veo diferencia entre esto y la vigilancia en los vecindarios que hemos tenido en nuestras comunidades durante años y años", afirmó Perry la semana pasada.

Bajo el plan, anunciado en la víspera de una convención estatal de republicanos, las cámaras y otros equipos serían aportados a voluntarios dueños de terrenos y colocados en los puntos más remotos de la frontera.

Las imágenes en vivo estarían disponibles para las autoridades y cualquier otra persona con conexión a internet. Quienes se oponen al proyecto dicen que es una pérdida de dinero y una idea peligrosa.

"Esta es una más de esas ideas pensadas sólo parcialmente que a la gente se le ocurren para ahorrar dinero, pero que no tienen aplicación práctica", dijo Jim Harrington, director del Proyecto de los Derechos Civiles en Austin, Texas.

"Sería mucho mejor invertir ese dinero en los pequeños poblados fronterizos de México para que la gente no tenga que emigrar", agregó.

Perry, quien actualmente compite por la reelección, ha cuestionado largamente que la frontera de 1.931 kilómetros de Texas sea un asunto estrictamente federal.

Esta semana Perry afirmó que los recortes en los fondos federales de seguridad interna, el aumento en los reportes de violencia fronteriza y la entrada de soldados mexicanos en Texas hace unos dos años son variables que han demostrado que el estado "no puede esperar a que Washington D.C actúe".

El plan para establecer las cámaras sería pagado por dinero de subvenciones que ya está en poder del estado. Los primeros equipos estarían instalados en un plazo de 30 días.

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